Vivimos en un momento que cientos de proyectos se lanzan cada semana que pasan sin pena ni gloria por el mercado. Muchos de ellos es por culpa de una mala gestión de los medios que se utilizan para que las noticias nos lleguen a los medios para que nos hagamos eco de ellos.
Sin embargo, en muchas ocasiones, gracias a la investigación y el día a día del sector, otros títulos sí que llaman la atención, quizá por su nombre, por unas capturas mostradas o por una historia que parece tener una buena trama.
Un gran juego
Así las cosas, nos vimos cara a cara con Someday You’ll Return, un desarrollo de una pequeña compañía independiente, CBE Software, formada por tan solo dos componentes, pero que parece que han sabido plasmar en este videojuego la esencia de su tierra natal (República Checa), así como los parajes en los que nos vamos a encontrar.
La búsqueda de una hija que se ha escapado otra vez por un bosque conocido, un padre atemorizado por la localización de su hija, junto con algún que otro problema de comportamiento de dicho padre (parece que no es una gran persona), darán a Daniel -así se llama nuestro protagonista- las excusas necesarias para tirarse de cabeza a buscar a su hija sin que importe nada más… Excepto lo que esos bosques esconden…
Exploración y terror
Estamos ante un juego que desde el principio nos damos cuenta vamos a tener que explorar, y mucho. Si a esto le añadimos unas buenas pinceladas de terror, estamos ante un gran juego que nos pondrá los pelos de punta en más de una ocasión.
Está claro. Nuestra hija Stela se ha escapado y no debemos parar de buscarla en todo momento. Suerte que tenemos su localización en el móvil (bendito móvil), que nos guiará en todo momento, pues la relación con la madre no es precisamente buen y lo único que provoca es confusión y mal humor a nuestro protagonista.
La suerte de Daniel es conocer perfectamente los bosques en lo que discurre casi toda la aventura. Esto, lejos de ser una ventaja, es un obstáculo, pues hace que la exploración de las zonas sea un verdadero infierno. Algo que se agudiza por las extrañas fuerzas que habitan por ahí, sin mucha explicación, y que se irá desgranando a medida que vayamos progresando en la trama.
Agudiza el ingenio
Durante la exploración, además de bastantes sustos (motivados muchos de ellos por la fantástica ambientación), tendremos que ir aprendiendo, poco a poco, a sobrevivir en unas condiciones no muy saludables, no solo físicamente, si no también mentalmente.
Ya hemos dicho que el protagonista no es precisamente un ejemplo de mejor padre del año, así que si a esto le añadimos sus movidas mentales, el juego se puede convertir en una pesadilla.
Para salvar estos obstáculos tendremos que agudizar el ingenio, pues los puzles están francamente bien estructurados; algunos son muy fáciles de resolver, pero otros nos harán rebanarnos los sesos para dar con la solución. Así pues, nadie nos dirá cómo hacer las cosas, por ejemplo, para combinar ítems de nuestro inventario; hay que utilizar la lógica. Por ejemplo -no queremos hacer spoiler, sólo para que veáis cómo es el juego-, si nos encontramos una escalera que se puede usar para acceder a un lugar, pero le faltan peldaños, el juego no nos dirá que busquemos los peldaños. Hay que buscar trozos de madera, cortarlos, si se precia, y clavarlos en la misma para que haga la función que necesitamos. Y así ocurrirá con todo. Tan solo alguna pista a modo de comentario será suficiente para abrirnos la mente y dar con la solución.
Las hierbas son la solución
En este sentido cobra especial importancia el manejo que hagamos del inventario, de los libros, y del tema de la herboristería o herbalismo, como prefiráis. Se trata de encontrar solución a muchos de los problemas con los que Daniel se encontrará en la búsqueda de su hija, desde soluciones contra el vértigo para poder cruzar puentes endebles, a curación de venenos o heridas, o incluso potenciar la vista para encontrar esas hierbas que necesitamos para hacer las pociones.
Para ello, tendremos que hacer las pociones, de las plantas que recolectemos, y siguiendo al pie de la letra lo que tenemos que echar en la marmita y el orden, teniendo en cuenta si debemos usar la planta tal cual está, si hay que cortarla con el cuchillo y la tabla, pasarla por el mortero… Vamos, en todo momento sabremos si lo hemos hecho bien. De otra manera, tendremos que vaciar el caldero y empezar de nuevo.
Muy divertido, y muy ajustado, pues como decimos en ningún momento estaremos guiados, si no que todo surge de manera bastante natural y lógica. Eso, que a simple vista parece normal, no lo es en absoluto, y demuestra el excelente trabajo que los chicos de CBE Software han logrado en Someday You’ll Return. Es decir, hablamos de una lograda trama, con un desarrollo casi perfecto, que no mete de lleno en la exploración, en el terror del juego, lo que se transforma en una experiencia de juego brutal.
Sí, es cierto, decimos casi perfecto porque en ocasiones notamos que el juego nos hace dar muchas vueltas para conseguir algo que, en principio, parecía más accesible, en bastantes ocasiones, un rodeo de más, una vuelta a por un objeto por donde acabamos de pasar… Eso puede ser debido a un intento de prolongar más la aventura, de darle más horas al juego, pero en absoluto molesta.
El sonido lo es todo
Otro de los aspectos que merece la pena destacar es la ambientación sonora. Ya desde el principio todos los sonidos, la música ambiental, los jadeos, los ruidos del bosque, de las fuerzas extrañas… Todo hace que el juego gane en puntos por meternos aún más en el ambiente terrorífico que Someday You’ll Return pretende.
Pero no sólo de sonido bebemos en el juego. Hablamos de una calidad visual que también aporta esenciales al juego, y no hablamos de fotorrealismo, si no de una parajes que nos ayudarán a meternos de lleno en la acción de la búsqueda de Stela, con sustos a tutiplén que nos mantienen en tensión constantemente. Si a esto además le añadimos que en ocasiones tenemos que salir zumbando, la cosa se acentúa, logrando una experiencia genial.
>h6>Conclusiones
Estamos ante un gran juego, y justo a la hora de publicar este análisis CBE Software ha anunciado que ha hecho unas modificaciones en el juego con un nuevo parche que acorta bastante la aventura en pos de maximizar la experiencia para los jugadores, limitando muchas de “esas vueltas” de más que comentamos anteriormente. Todo ello, además, está perfectamente bien plasmado gracias al genial uso del engine Unreal, algo que ya dice mucho del juego.
Así, podemos decir que, de nuevo, los creadores han vuelto a acertar a la hora de satisfacer a los seguidores del juego. Solo un pequeño fallo: el juego está en inglés o checo, así que los que no sean angloparlantes lo van a tener algo difícil.
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