El undécimo
Sin Inafune en el equipo no se podría presagiar un juego de gran altura, pero Capcom lo ha logrado, al menos con el primer nivel que hemos podido jugar. Megaman es un juego conocido por su gran dificultad, que no os engañe su aspecto de plataformas 2D con un protagonista simpático. Su complejidad es endiablada ya en algunos tramos del primer nivel, por fortuna hay cuatro niveles de dificultad. En el más fácil conseguimos algunas ayudas, como que nos rescate el pájaro mecánico Beat para que no suframos daños. Según subamos su dificultad iremos quitando ayudas y nuestras vidas no serán infinitas.
En esta demostración solo hemos jugado a un nivel, pero nos permite ver otros 7 slots vacíos, lo que nos hace presagiar que contaremos con 8 niveles. Pueden parecer pocos, pero viendo la extensión del nivel dedicado a Block Man, podremos presagiar que como mínimo estaremos 6 horas con el juego completo. El primer Robot Master al que deberemos plantar cara es Block Man, compuesto por ladrillos. Nos desplazaremos hasta un nivel precioso, en el que dibujado a mano cruzaremos por debajo de un acueducto por el que caerán diferentes cascadas de agua, creando un bonito arco iris. Aunque este Megaman es un homenaje a los juegos antiguos, perdiendo rápidamente estos decorados para dejarnos en estancias interiores más básicas.
Nuestro Megaman deberá sortear algunas plataformas saltando por los escenarios en 2D. Sus primeros pasos serán sencillos, pero pronto encontraremos algunas complicaciones, que requerirán de habilidad y de inteligencia. El momento más estresante llega cuando somos perseguidos por un rodillo gigante, que amenaza a nuestro héroe con aplastarlo. A nuestro paso irán apareciendo pequeños caminos entre las paredes, algunos bloqueados por piedras que deberemos destruir con nuestro brazo cañón. Deberemos pensar muy bien nuestro pasos en la sección que caen muros de piedra, donde solo el salto normal no bastará para alcanzar la zona más alta.
