Si algo nunca ha acabado de funcionar es la implicación de Hollywood en temas de producción y dirección de videojuegos, aunque son varios los actores y directores que lo han intentado. El extraordinario Steven Spielberg (Parque Jurásico), siempre ha estado ligado a los videojuegos, participó activamente en E.T. El Extraterrestre (aunque se dice que mucho caso no le hicieron), un juego que hundió a la todopoderosa Atari. Aunque a su favor hay que reconocerle que fue el creador de la serie bélica de Electronic Arts, Medal Of Honor, luego participó en varios juegos de corte infantil. Michael Bay (Pearl Harbor) también pondría su granito de arena en el mundo de los videojuegos, creando un juego arcade de carreras conocido como Split/Second. Sus bajas ventas le hicieron no continuar en el mundo, eso sí, el juego mostraba espectaculares explosiones en escenarios destruibles. Del que por cierto, podría estar en desarrollo la secuela que se canceló en su momento.
Otro fanático de los videojuegos es el director mexicano, Guillermo del Toro (La Forma del Agua), al que se le considera maldito en la industria. En 2010 presentó un videojuego de terror conocido como InSANE, un juego que desarrollaría junto al equipo de Volition, de él solo conocemos un pequeño teaser, ya que no llegó a salir en 2013 como estaba anunciado. En 2016, él y Hideo Kojima (Metal Gear Solid) presentaban una demostración del que sería un adelanto del próximo Silent Hill. El anuncio revolucionó la industria, pero solo pudimos disfrutar de una espectacular demostración. El resultado fue un proyecto cancelado y el despido del equipo de Kojima de Konami. Kojima está desarrollando Death Stranding, en donde participará junto a Del Toro y Norman Reedus (The Walking Dead), como actores.