Un aprendiz de mago
Tendremos ciertas limitaciones, al principio podremos desplazarnos entre las habitaciones, hasta que solucionando un sencillo puzle consigamos la habilidad de salto. Nuestro objetivo será avanzar por pasillos y salas, hasta encontrar algún mecanismo que nos permita abrir zonas bloqueadas. Para resolver puzles podremos empujar objetos, ya sean cajas o columnas, usar mecanismos, disparar un cañón, o realizar grandes saltos usando unos muelles. En la parte más avanzada de la aventura, nos haremos con una poderosa varita de luz. Esta nos permitirá espantar enemigos o visualizar plataformas invisibles. Su uso estará limitado a una barra de energía, pero podremos recargarla si recogemos mariposas de luz. Como curiosidad, nuestro protagonista también podrá bucear en ciertos niveles, en estos momentos deberemos vigilar nuestra barra de oxígeno, pudiéndola recuperar al situarnos encima de los ventiladores de aire. Aunque en general tocar el agua nos hará perder una vida.
Objetos mágicos
En el modo historia podremos conseguir un total de 14 mapas, uno para cada nivel. Estos no marcarán nuestra ubicación, pero sí zonas que usaremos para guiarnos, incluso la localización de objetos importantes. Entre los coleccionables, podremos encontrar 32 patitos de goma, que estarán distribuidos por zonas de agua. Para recogerlos tendremos que saltar sobre ellos, y antes de que desaparezcan realizar un segundo salto a la plataforma más cercana. Un segundo coleccionable son los casetes, hasta un total de 50, que simularán las cargas de los ordenadores antiguos. Los encontraremos en zonas fuera del escenario, debiendo usar estanterías, o rozar paredes para encontrarlos fuera de plano.
Para ayudar a nuestro personaje a salir del videojuego, deberemos reunir 4 piezas de hardware. Si queremos conseguir el final auténtico del juego, deberemos encontrar 6 esferas. Estas se consiguen accediendo por las puertas Insert Coin, que nos dirige a la habitación de la nada. Dentro de ella encontraremos 6 caminos diferentes. Las puertas se abren usando monedas, que conseguiremos realizando misiones extras, que son las más divertidas del juego. Realizaremos una alocada excursión, a bordo de una vagoneta por vías de madera, en las que deberemos saltar entre vías. O realizaremos una bajada de una pista de esquí, en la que tendremos que pasar entre los banderines. También habrán habitaciones con retos complicados que nos obsequiarán con estas monedas. Los desafíos que nos esperan en la habitación en medio de la nada, son de tiempo. En este tiempo deberemos pintar el suelo de un solo color pasando por encima, o llegar a la cima de una torre, llena de plataformas, objetos que esquivar y puertas que nos hacen cruzar la torre, entre otros.