The Keep es la nueva base de operaciones de nuestros Héroes. Aquí podremos planear la guerra en curso al elegir en qué misiones participar y probar nuevas armas, talentos y habilidades en la sala de práctica.
Y puestos en batalla, lo principal será mantenerse siempre unidos, pues de la cercanía y la ayuda de los demás dependerá el éxito de cada grupo de ir conquistando misiones.
Como veis, las posibilidades del juego parece que se han ampliado bastante, siendo la jugabilidad uno de los factores en que Vermintide II va demostrar que se va a convertir en un digno sucesor de la saga.
Por supuesto, el sistema de premios no podía faltar. Si terminamos a buen fin con la misión, se nos dará experiencia en base a los logros que hayamos conseguido, y así obtener cofres con diferentes mejoras, armas, armaduras… Y por supuesto los puntos de experiencia que, además de ir aumentando nuestro nivel, nos permitirán ir avanzando en el árbol de habilidades de nuestro personaje.
Otro de los factores es poder utilizar la forja para crear nuestro propio equipo, y esto se hará a través de fundir los objetos que ya no necesitemos para obtener mariales de ellos, y hacer nuevos con mejoras muy notables.
Los Héroes están reforzados con una habilidad activa y otra pasiva, cada una única para cada clase. Las habilidades pueden ser cruciales para cambiar el rumbo de una batalla, así que aprender a usarlas de manera efectiva para aumentar la capacidad de matar y las posibilidades de supervivencia de nuestro equipo será crucial.