Estivania
Empezaremos en un pequeño campamento, hasta construir uno de los reinos más grandes del mundo. Podremos crear una gran cantidad de edificios diferentes, pero todo estará preestablecido, solo tendremos que seleccionar el edificio con un puntero y pagar una cantidad de Guildes Reales para crearlo. Sentándonos en el trono podremos gestionarlo, fabricando los edificios que necesitemos, subirlos de nivel para mejorar su producción y añadir nuevas investigaciones. O realizar investigaciones para añadir nuevas habilidades o mejoras a nuestros protagonistas. Una vez creado el edificio, podremos asignar súbditos para que trabajen e investiguen en él. Esto es muy sencillo, ya que el propio juego nos dirá qué súbditos son preferibles en cada edificio. Dependiendo del nivel del personaje, las investigaciones que realicemos se harán a mayor velocidad o podremos conseguir investigaciones más avanzadas. Lo mismo pasa a la hora de recolectar diferentes materiales.
Tener una gran cantidad de súbditos nos permitirá recaudar más Guildes Reales, mientras que construir edificios aumenta nuestra influencia. La influencia amplía las opciones de edificar, o hace que el reino atraiga a más súbditos. Siempre tendremos que recoger los Guildes que hayamos recaudado, ya que hay un límite de cantidad guardada, al igual que el almacén para los objetos que produzcamos. A parte también tendremos edificios especiales, como un mesón, la fragua, etc. Estos edificios nos permiten crear objetos especiales, o armas y armaduras, incluso mejorarlas usando materiales y dinero. En el edificio dedicado a la magia, podremos subir de nivel nuestros poderes y aprender nuevos, como hablar con plantas y animales o con espíritus. El dedicado a los Fofi nos permitirá crear nuevas especies o subirlas de nivel, dándoles de comer su comida favorita.
Para convencer a los 103 súbditos de que vengan a Estivania deberemos realizar diferentes misiones secundarias como recaderos. Ofrecer una cantidad de objetos, eliminar un tipo de enemigos conocidos como monstruos emanantes (hay 50 por el mundo) y vencer a ejércitos, serán las misiones más solicitadas. Estas se pueden hacer aburridas, pero nos harán visitar nuevas rutas, incluso se hace necesario para aumentar el nivel de los protagonistas, sin tener que farmear (acción de repetir una misma situación con la intención de recolectar un tipo de objeto, o aumentar nuestro nivel buscando combates por el mapa) en exceso. Para poner un ejemplo, uno de los pedidos es conseguir nueve esferas misteriosas. Para ello deberemos atravesar las puertas espejo, que nos llevarán a un lugar con diferentes niveles, en los que no podremos guardar hasta que salgamos del escenario. Nuestro objetivo será enfrentarnos al guardián que se encuentra en el último piso. Antes de llegar a él, podremos explorar las plantas, mientras que un medidor de riesgo va aumentando el nivel de dificultad de nuestros enemigos. Explorar estas mazmorras nos aportará equipo de gran valor, además gracias a las esferas que vayamos encontrando podremos disminuir el riesgo o abrir cofres cerrados. Otra manera de reclutar subalternos es con los recados exprés, realizarlos nos premiará con monedas canjeables, para luego pagar a nuevos súbditos o conseguir material raro.