Anteriormente hemos visto como Dragon Ball era importante para el lanzamiento de PlayStation, que compartía juegos con las máquinas de Nintendo. En 2008 llega el turno para la nueva generación de juego de Dragon Ball. Las videoconsolas que cogen el testigo son PlayStation 3 y Xbox 360, la máquina más fuerte de Microsoft.
En busca de la lucha definitiva
Tekken, Dead Or Alive y Virtua Fighter dominaban el mercado de los juegos de lucha poligonales. Aunque su época dorada fue la anterior, mantenían parte de la hegemonía. Los juegos dedicados a Dragon Ball intentaban aportar novedades al género y hacerse un hueco, más allá del propio nombre.
En 2008 se lanzó Dragon Ball Z Burst Limit; su modo historia, conocido como Crónicas Z, incluía las piezas dramáticas: daban más fuerza a las secuencias que recreaban momentos clave del anime. Los combates eran 1 vs 1, aunque podíamos tener la ayuda de un personaje secundario. Su estilo de lucha era en 2D con el que se representa el arco argumental de los Super Saiyans hasta Cell.
Al año siguiente se lanzó Dragon Ball Raging Blast, el sucesor espiritual de la saga Budokai Tenkaichi. El juego aportó importantes novedades, como expresiones faciales, rotura de ropa, escenarios destruibles y técnicas especiales. En 2010 tuvo una secuela con más de 100 personajes, aunque fue un juego muy criticado. Su historia no tenía conexiones y la cámara daba problemas.
Dragon Ball Z Ultimate Tenkaichi hizo su aparición en 2011. Incorporaba por primera vez en la saga Quick Time Events (pulsar el botón indicado en el menor tiempo posible). Esta vez nos enfrentaremos a enemigos de gran tamaño como Vegeta Ozaru. Se adaptaron cinemáticas del anime remasterizadas para la ocasión. En 2014 llegaría Dragon Ball Z Battle of Z, un juego que se lanzó también para PSP Vita (el único juego de la saga para esta portátil). El juego incluía 70 personajes para combates en equipos de hasta cuatro miembros.
Los dos juegos anecdóticos son Dragon Ball Z for Kinect, un juego exclusivo para Xbox 360. Este aprovechaba las características de Kinect. El control por movimiento vía cámara nos permitía realizar los movimientos especiales y los veíamos ejecutarse en pantalla. Era un poco tosco en la detección del movimiento, pero te hacía sentir una mezcla entre Super Saiyan y bailarin. Podíamos seleccionar entre 50 personajes y luchar como ellos en primera persona, mientras en pantalla se nos mostraba el movimiento que debíamos realizar. El segundo es una remasterización, Dragon Ball Budokai HD Collection, que incluía Budokai 1 y 3 con mejoras para la alta definición, nuevas melodías y trajes alternativos.
La era Xenoverse
La primera entrega lanzada en 2015 apareció en todos los sistemas (PlayStation 3, PlayStation 4, Xbox 360 y Xbox One). Se trata de juegos de lucha en 3D con entornos completamente destruibles. Nosotros éramos un patrullero del tiempo del que podremos seleccionar raza, género, ropa y constitución física. Incluía 200 movimientos especiales y 450 vestimentas, y estaba creado para jugar online explorando entornos abiertos y realizando combates. En 2016 salió su secuela para PlayStation 4, Xbox One, PC y Nintendo Switch.
La actualidad
En la actualidad hemos recibido el mejor juego de la saga en el género de la lucha. Dragon Ball FighterZ es fiel y contiene todos los movimientos de cada luchador. Impresiona por la calidad gráfica Cell Shading y la facilidad de control en el manejo de los personajes. Si queréis más información os recomendamos nuestro análisis.
El último juego anunciado de la franquicia es Dragon Ball Z Kakarot. Este juego es un Action RPG, con un acabado gráfico impresionante y promete cubrir todo el arco argumental de Dragon Ball Z. No os olvidéis de leer nuestro avance del juego.
Seguramente las próximas consolas PlayStation 5 y Xbox Series X también recibirán más juegos de la saga. Nosotros hemos nombrado un total de 69 juegos de la franquicia, sin contar con los títulos lanzados para móviles, recreativas y algunas otras portátiles. Una cantidad que no parará de crecer mientras que las generaciones de los ochenta y noventa sigan jugando a videojuegos. Estos seguirán pidiendo a gritos más títulos y se irán añadiendo nuevos fans. De hecho, estamos esperando con los brazos abiertos Dragon Ball Z Kakarot, mientras nos partimos el lomo jugando a Dragon Ball FighterZ.
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