En 2013 aparecía State of Decay, un juego exclusivo para Xbox 360. Este se apoyaba en su online, aunque también se podía jugar en solitario a su campaña. En él se nos presentaba un personaje random, que debía sobrevivir a un apocalipsis zombi. Desde luego que así explicado su originalidad no se encuentra por ningún lado. Su característica principal estaba en su jugabilidad, ya que teníamos que crear una comunidad con los personajes que encontrábamos. Gracias a estos y a nuestra exploración íbamos encontrando objetos para crear los edificios de esta comunidad, permitiéndonos estar defendidos de oleadas zombis. Para la exploración contábamos con nuestro protagonista, pero además escogíamos a diferentes personajes no jugadores para formar un equipo. Cada uno de ellos con habilidades diferentes, pero estos podrían sobrevivir o perecer en el camino. Sin un protagonista claro, podíamos cambiar de protagonista, con el objetivo de que esa comunidad sobreviviera.
La comunidad
Deberemos crear una comunidad con todos los supervivientes que podamos salvar de las garras de los zombies. En esta ocasión contaremos con más variedad de zombis, en los que se incluye unos de gran tamaño, a los que podremos trepar para poder ejecutarlos, eso sí, si nos atrapan estaremos perdidos. Durante la salvación de algunos supervivientes, deberemos tomar decisiones morales, que quedarán en nuestra conciencia.
Deberemos gestionar la comunidad, creando edificios, mejorándolos y personalizarlos para darle ese toque nuestro. Contaremos con diferentes instalaciones como enfermerías, talleres, muros de defensa y hasta atalayas de observación. Los supervivientes pronto formarán parte de la comunidad, pudiendo gestionar sus habilidades para acompañarnos a realizar las misiones. Tendremos que tener claro nuestro objetivo, ya que cada miembro requerirá de una habilidad para poder superarlas.
Estados Unidos
La localización será EEUU, en una zona con grandes bosques y algunas pequeñas poblaciones. El bosque será la mejor zona para refugiarse, mientras que las poblaciones estarán llenas de zombis, pero también de los recursos necesarios que deberemos gestionar. En estas zonas deberemos escoger cómo enfrentarnos a nuestros enemigos, ya sea de forma silenciosa o armando un ruido tremendo, cosa que alertará a otros zombis, o comunidades. Nos desplazaremos por un mundo totalmente abierto, y de unas dimensiones tan grandes, que podremos usar diferentes vehículos, como todoterrenos y los característicos muscle cars estadounidenses.
Secuela exclusiva
Microsoft no dudó en apostar por la secuela después de los buenos resultados de la primera entrega. En esta ocasión reforzando la parte multijugador, en la que podremos jugar hasta cuatro personas, cada una con su respectiva comunidad. La política de Microsoft es clara, juegos exclusivos capaces de explotar sus servicios, de ahí que el servicio Gold coja fuerza, como sucede en Sea of Thieves. Aquellos que no tengan amigos, o que tengan alergia al online, también podrán disfrutarlo en un jugador sin conexión permanente, aunque el juego no contará con un modo historia.
Gold no será el único servicio de beneficio que aproveche la secuela, también podremos disfrutarlo tanto en PC, como en cualquier Xbox One comprándolo solo una vez, y con juego cruzado entre plataformas con el sistema Play Anywhere. Como pasaba con Sea of Thieves, todos aquellos suscritos al servicio Xbox Game Pass podrán disfrutar de él pagando la suscripción desde su lanzamiento. Para aquellos que se quieran hacer con él, estará a un precio reducido de 29,99€ la versión normal, que ya podéis reservar en el market de Windows. Los poseedores de una Xbox One S podrán disfrutar de toda la gama de colores que aportará el HDR, y si sois afortunados de tener una Xbox One X, una definición 4K.