Un bello anime
Vanillaware nos regala su toque artístico para presentarnos 13 Sentinels: Aegis Rim recordándonos productos como Odin Sphere y Dragon’s Crown. Su acabado visual presenta diseños anime con unos preciosos fondos que representan ciudades, templos, el instituto y las afueras de la ciudad. La variedad de escenarios es amplia presentando en cada capítulo ubicaciones diferentes. Algunos escenarios contarán con diferentes animaciones, como animales que corretean por las calles o personajes que hacen sus rutinas diarias, todo con su toque particular coloreado con acuarelas. Los escenarios son pequeñas ubicaciones limitados a la propia pantalla. Aunque hay escenarios que contarán con scroll o incluso diferentes zonas. Una vez salgamos del escenario o área acabará el capítulo.
Una historia de ciencia ficción
Estamos en los ochenta cuando en la ciudad de Ashitará se estrella algo gigantesco procedente del cielo. Es un ser monstruoso de gran tamaño que crea el caos en la ciudad cundiendo el pánico entre los civiles. La destrucción de la ciudad ha empezado, pero un gigantesco robot centinela hará su aparición para evitar la catástrofe. Su piloto es una estudiante de secundaria del instituto Sakura y no estará sola, ya que otros 12 estudiantes se encontrarán en mitad de la batalla. La historia girará en torno a ellos dando respuestas a su pasado, porqué son amenazados y como han llegado a ser pilotos de los centinelas.
Los estudiantes son: Juro Kurabe, Iori Fuyusaka, Shu Amiguchi, Megumi Yakushiji, Yuki Takamiya, Renya Gouto, Ryoko Shinonome, Natsuno Minami, Tomi Kisaragi, Nenji Ogata, Keitaro Miura, Takatoshi Hijiyama (brutal su bocadillo de Yakisoba) y Ei Sekigahara. La historia se dividirá por capítulos con una duración de entre 5 y 10 minutos. Cada capítulo se nos presenta de diferentes formas representadas en el presente, futuro o pasado, sueños y recuerdos, que recogerá todos los elementos clásicos de los 80 como los mechas gigantes, los kaijus, viajes temporales, hombres de negro, alienígenas y personajes inspirados en los clásicos de la década. Nosotros seleccionaremos qué personaje queremos conocer, mezclándose su historia con la de los otros estudiantes y dejándonos flipados con los hechos y sus giros argumentales constantes.
Explorando como en una aventura gráfica
Pese a la limitación del escenario, podremos movernos libremente por él, ya sea para conversar como para encontrar algunos objetos. Recuerda en cierta forma a una aventura gráfica, ya que dependeremos de las conversaciones y de los objetos para avanzar. Aquí los objetos se representan como palabras clave, que estarán disponibles en un menú al que accederemos pulsando un botón. Estas palabras clave nos permitirán pensar sobre el tema, comentarlas con otro personaje o enlazarlas entre ellas. Realizando estas acciones conseguiremos otras palabras clave, llevándonos por diferentes ramificaciones de la historia. Hay ramificaciones bloqueadas, que solo descubriremos si completamos algún combate o alguna parte de la historia de otro personaje.
La historia puede parecer un lio, ya que está narrada sin un orden cronológico. Por fortuna este enredo lo podremos recomponer con las escenas registradas en el archivo de documentos. También conseguiremos puntos de misterio que nos servirán para desbloquear archivos secretos. Toda la historia cobrará sentido de una manera muy satisfactoria, siendo el trabajo más redondo de George Kamitani. De hecho, fue nominado en los The Game Awards 2020 como mejor narrativa y en la revista Famitsu al Premio a la mejor narrativa y mejor aventura otorgándole el Famitsu Dengeki Game Award 2019.
Combate estratégico
El 80% del juego se basa en la novela visual, pero también disfrutaremos de los combates de manera estratégica. Incluso en el menú podremos decidir si jugar las historias o completar las batallas, aunque para completar el juego deberemos superar las dos vertientes. Nuestro objetivo será no perder ningún centinela o aguantar el tiempo necesario para activar el escudo defensivo conocido como sistema Egida. Nosotros controlaremos un máximo de seis centinelas que se desplegarán por un mapa 3D de la ciudad. Será como una especie de visión holográfica con perspectiva (top-down) que nos mostrará nuestra posición, la de los enemigos y la torre de defensa que deberemos proteger.
La acción es en tiempo real, solo parándose para seleccionar la orden a realizar. Cada centinela requerirá de un tiempo para volver a ofrecerle una orden. Nuestras acciones serán movernos, reparar los centinelas o activar las defensas que nos harán recuperar Puntos de Energía. Unos puntos de energía que usaremos para realizar diferentes acciones de ataque. El armamento de los centinelas serán misiles que afectarán a zonas, balística de largo alcance que atacará en línea, combates cuerpo a cuerpo, saltos con caídas demoledoras, torretas o arrasaremos a enemigos en carrera. Cada centinela tendrá su equipo que podremos personalizar en la terminal. En ella podremos desbloquear y mejorar habilidades y el uso de estas. Si nuestro centinela acaba muy débil, podremos eyectar nuestro piloto, que será muy vulnerable.
Los combates son minimalistas, pero son frenéticos presentando una buena cantidad de enemigos. Los hay de diferentes tipos, ya sean robots pequeños terrestres como otros voladores, hasta Kaijus. Atacaremos a los enemigos, pero también a sus misiles para defender la torre de defensa. Los centinelas tendrán Metahabilidades otorgadas por los Metachips que activaremos una vez en cada combate al derrotar enemigos. Estos afectarán a todos los enemigos en pantalla, llegándolos a inmovilizar temporalmente. Las explosiones y la pirotecnia son totales, llegando a su punto culminante en los combates finales. Lamentablemente los combates no son muy difíciles, ni cuando superamos el juego y nos ofrecen el nivel más difícil.
Premiado y con razón
13 Sentinels: Aegis Rim es un juego con una duración de 40 horas, 5 de ellas dedicadas al combate, por lo que lo que se centra en la historia con un aspecto visual notable, el mejor trabajo de la desarrolladora. Sus personajes nos engancharán y la historia da tantos giros que es increíble como todo acaba teniendo sentido. Una historia que cuenta con voces en japonés e inglés y unos textos en castellano dignos de aplaudir. La banda sonora la ha compuesto Hitoshi Sakimoto, un trabajo brutal por la variedad enorme de composiciones y lo bien interpretadas que están. Su narrativa está creada de una forma tan especial, que sería imposible llevarla a otros medios, solo disfrutable como videojuego.
Análisis del juego gracias al código de descarga facilitado por PLAION España.