Sin regeneración de salud
Algo que le viene muy bien a la campaña es la renuncia a la regeneración de la salud, algo muy demandado por una amplia gama del público de CoD, y tratar de crear un sentimiento de equipo basado en que sean nuestros compañeros los que nos faciliten los botiquines o la munición. Y así no tener que estar nosotros buscando cajas de botiquines o munición aunque también las haya y podamos recogerlas del suelo. Puede que sea una decisión acertada, ya que la regeneración de salud estaba muy “usada” y “desgastada” y la incorporación de la barra de salud y los botiquines hace que nos planteemos las diferentes situaciones de combate de una manera u otra según los recursos disponibles. Por otra parte, la exploración durante las misiones también se siente presente puesto que sigue habiendo coleccionables y, además, como novedad en la saga, aparecen las llamadas Acciones Heroicas, como salvar a compañeros y apartarlos de las garras de un nazi que va a acabar con ellos. Aunque esto no tenga una utilidad aparente, supone una gran satisfacción saber que hemos salvado la vida de un compañero que estaba a punto de morir.
Para concluir con la campaña hay que decir que los desarrolladores han conseguido que los personajes y el ambiente se sientan realmente como una guerra, es decir, que los soldados luchan en la guerra por sobrevivir y volver con sus familias.
El deseado modo online
El modo online de Call of Duty WWII se asienta sobre la base de los juegos anteriores. Podemos disfrutar de los modos de juego clásicos (duelo por equipos, dominación, captura la bandera, baja confirmada, ByD…) en diez mapas de tamaño pequeño o mediano, siempre al estilo CoD, algunos sacados de la campaña y otros nuevos, como “Gibraltar” o “USS Texas”. Al ser un CoD, los enfrentamientos resultan muy ágiles y divertidos en mapas dinámicos; algo que es evidente es que se elimina el tan aclamado doble salto que estaba presente en anteriores entregas futuristas como Black Ops III e Infinite Warfare.
El modo multijugador viene cargado de nuevos modos de juego, amén de los modos clásicos. Un ejemplo es el nuevo Modo Guerra, que resulta la mejor incorporación al multijugador (y además la más divertida). Revoluciona todos los modos hasta ahora vistos en Call of Duty y la temática es muy parecida al modo de “asalto” en la saga Battlefield, lo que nos parece una gran incorporación. Podemos visitar tres mapas enormes en este modo, que se abren de manera progresiva según se van completando objetivos, con distintas operaciones. En Operación Neptuno, los aliados asaltan las playas de Normandía con la ayuda de varios bots y el eje tiene que repelerlos. En Operación Breakout se trata de defender unos cañones antiaéreos y en Operación Griffin, evitar a toda costa que una columna de blindados cruce un puente. Son modos de juego en los que un equipo defiende y los atacantes cuentan con distintas ventajas para poder sobrepasar a las defensas que se las han impuesto. Y la verdad, es que el hecho de que el campo de batalla evolucione es una gran incorporación a la saga. Además, con estos modos de juego se apuesta más por el trabajo en equipo y no por las hazañas individuales de cada jugador como se hace en los otros modos, donde lo único que importa es mejorar las estadísticas de cada uno.