Resultado de una herencia
La historia nos sitúa en Mundaun. Tras enterarse de la misteriosa muerte de su abuelo en un incendio, el protagonista, Curdin, viaja a Mundaun por primera vez desde su infancia. Al llegar, pronto descubrirá que algo antiguo y diabólico acecha a los habitantes que quedan en el lugar. En su búsqueda por averiguar el significado de estos siniestros acontecimientos, viviremos una odisea por la montaña Mundaun, donde recorreremos empinadas praderas y atravesaremos campos pedregosos hasta alcanzar su nevada cima.
Nosotros somos los elegidos para averiguar las extrañas circunstancias que han provocado la muerte del abuelo del protagonista, rodeados de un lúgubre paraje lleno de misterios por resolver, con grandes dosis de terror.
Estamos ante una aventura de exploración y resolución de puzles, en la cual tendremos que ir descubriendo poco a poco todos los misterios, rodeados de una ambientación que a veces se nos antoja algo caótica y poco clara: los excesos de niebla a veces nos harán perdernos por los lugares que recorreremos.
Aventura en primera persona
Desde el principio estamos inmersos en la piel de Curdin, en primera persona, lo que hace que la inmersión en el juego sea mucho más profunda. Las primeras pistas son fáciles de seguir, pero después poco a poco se irá complicando las cosas, llegando a desesperar un poco, pues la trama no aclara muchas veces qué es lo que debemos hacer.
Contamos con la inestimable ayuda de un diario, donde iremos recopilando toda la información que vayamos sacando, así como guardar los objetos en nuestro inventario para utilizarlos en algún momento. Esto, que parece sencillo, a veces se vuelve tedioso porque no encontramos el objeto concreto con el que interactuar o bien los objetos son tan iguales que resulta difícil elegir cuál es el que se adapta a las necesidades del guión, teniendo que utilizar el método de ensayo/error.
Gráficos impresionantes
Realizados a mano con dibujo al carboncillo, todo el apartado gráfico depende de Michel Ziegler, quien ha sabido expresar perfectamente la ambientación que Mundaun necesita para plasmar ese ambiente tétrico.
Precisamente ese ambiente inspirado en los Alpes suizos nos lleva a pensar en el arduo trabajo realizado por su autor y en la belleza de los mismos, incluso siendo en blanco y negro (pintados con carboncillo), y uno de los puntos mejores del juego.
El ambiente tétrico que le ha otorgado Michel Ziegler a Mundaun sí le da ese matiz de terror, aunque la aventura en sí no es que de miedo precisamente. Sí lo es la exploración, pues el sistema planteado de “infiltración” nos parece de los mejores plasmados en juegos de este tipo.
Ambientación al poder
El pilar básico de Mundaun es su ambientación, como hemos mencionado antes. El juego está muy bien equilibrado y hace de la exploración y la infiltración un arte que, combinado con los gráficos apabullantes de Michel Ziegler, le dan ese toque tétrico que los desarrolladores de Hidden Fields buscaban en el juego.
Además, para potenciar la ambientación, el juego, aunque está perfectamente traducido al castellano (nos referimos a los textos, claro), han dejado las voces originales en una lengua original de la zona de los Alpes donde se ambienta el juego, lo que le da un punto más a la hora de mejorar esa ambientación a la que aludimos.
Así, Mundaun no es un juego de terror como otros indican, pero sí tiene esos componentes de suspense y “miedito” que todo juego de estas características debe tener.
Análisis del juego gracias al código de descarga facilitado por Best Vision.