Crash Bandicoot nació de la necesidad de Sony por encontrar un personaje que representara a la compañía, ya que Nintendo tenía a Mario y SEGA a Sonic. Por eso le pidió a Naughty Dog (Jak & Daxter, Uncharted, The Last of Us) que crearan un juego de plataformas que fuera su buque insignia, reconociéndose la marca por él. Sony enseguida se dio cuenta de que quizás no le hacía falta un héroe representativo, ya que al final la fuerza de la compañía era la propia marca PlayStation. Que no tardaron en explotar hasta llegar a lo que es hoy en día.
Naughty Dog empezaba a desarrollar un título que tendría cierta relevancia en el género de las plataformas, pero que no conseguiría tener la influencia de sus rivales. La trilogía de Crash original se gestionó en PlayStation One, en plena transición del bitmap a los polígonos. La capacidad de PlayStation le permitía trabajar con estos últimos y, por ello, se desarrolló un juego poligonal, pero con ciertas limitaciones. No se trataba de un juego de mundo abierto, como supuso la llegada más tarde de Super Mario 64, que revolucionó la concepción de las plataformas 3D (aunque recuerdo un título en primera persona llamado Jumping Flash (PSX), que ya mostraba un mundo 3D abierto para el género de las plataformas). Naughty Dog prefirió no arriesgar y apostar por un título con potencia visual, por lo que lo limitó a lo que ahora conocemos como plataformas 2,5D, y que en su momento fue un pionero. Hasta entonces las plataformas se desplazaban lateralmente, pero con la llegada de Crash apareció la profundidad en los escenarios.
Una de las características del juego, y que muy pocos imitaron (por fortuna), es el desplazamiento con la cámara detrás, dirigiéndonos hacia adelante o atrás. Esto crea muchos problemas para el jugador en el cálculo de algunos saltos, pero le daba un toque distintivo, y para qué engañarnos, una seña de identidad que pronto los usuarios añorarían. Crash contó con tres títulos para PlayStation, además de un juego de Karts al más puro estilo Mario Kart, que sinceramente echo de menos que no hayan incluido. Después de esto, la marca fue vendida por parte de Sony a Activision, presentando juegos más bien olvidables. El año pasado Activision se animó a lanzar este recopilatorio con la saga original, retocándolo gráficamente y en exclusiva para PlayStation 4. Pocos podíamos esperar que se animaran a sacarlo de su exclusividad (excepto los profesionales de Somos Xbox), así ahora los usuarios de Xbox One y Nintendo Switch pueden disfrutar de un clásico.